La Diócesis celebra la Jornada mundial de las migraciones
20 de enero de 2018
El domingo 14 de enero se ha celebrado la Jornada mundial de las migraciones bajo el lema “Acoger, proteger, promover e integrar a los emigrantes y refugiados”.
El equipo de la Delegación episcopal de migraciones, con el presbítero Julián Perdiguero Serrano al frente, organizó la Jornada con la celebración de la Eucaristía en la Parroquia de El Salvador de Soria, presidida por el Obispo, Mons. Abilio Martínez Varea; en la ceremonia participaron fieles de muy diversas procedencias: Bolivia, Perú, Argentina, Uruguay, Ecuador, Colombia, Venezuela, República Dominicana, Honduras, El Salvador, Brasil, Bélgica... Una iglesia “llena y rebosante de color y de vida”, como afirmó el Obispo en su homilía, que estuvo centrada en el lema de la Jornada, en el esfuerzo por forjar una cultura del encuentro que suponga un enriquecimiento para la sociedad. Mons. Martínez Varea afirmó que “la mejor integración es la pertenencia a la comunidad eclesial”; “aquí hay muchos colores, muchas banderas, pero todos estamos unidos por el Bautismo; cuando viene alguien de otro país o de otro lugar de España, no recibimos a un emigrante, recibimos a un hermano”, explicó. Al final de la Misa, el delegado agradeció el trabajo de todos y animó a seguir en ese esfuerzo día a día para ir consiguiendo los objetivos de esta Jornada.
Tras la celebración se compartió un aperitivo en los salones parroquiales y varios grupos de Bolivia, República Dominicana, Venezuela y Colombia presentaron una muestra de su folclore con música y danzas.
El equipo de la Delegación episcopal de migraciones, con el presbítero Julián Perdiguero Serrano al frente, organizó la Jornada con la celebración de la Eucaristía en la Parroquia de El Salvador de Soria, presidida por el Obispo, Mons. Abilio Martínez Varea; en la ceremonia participaron fieles de muy diversas procedencias: Bolivia, Perú, Argentina, Uruguay, Ecuador, Colombia, Venezuela, República Dominicana, Honduras, El Salvador, Brasil, Bélgica... Una iglesia “llena y rebosante de color y de vida”, como afirmó el Obispo en su homilía, que estuvo centrada en el lema de la Jornada, en el esfuerzo por forjar una cultura del encuentro que suponga un enriquecimiento para la sociedad. Mons. Martínez Varea afirmó que “la mejor integración es la pertenencia a la comunidad eclesial”; “aquí hay muchos colores, muchas banderas, pero todos estamos unidos por el Bautismo; cuando viene alguien de otro país o de otro lugar de España, no recibimos a un emigrante, recibimos a un hermano”, explicó. Al final de la Misa, el delegado agradeció el trabajo de todos y animó a seguir en ese esfuerzo día a día para ir consiguiendo los objetivos de esta Jornada.
Tras la celebración se compartió un aperitivo en los salones parroquiales y varios grupos de Bolivia, República Dominicana, Venezuela y Colombia presentaron una muestra de su folclore con música y danzas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario