X SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

                                      

20 de mayo.  BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, MADRE DE LA IGLESIA, BAJO LA ADVOCACIÓN "DEL MAR", Patrona secundaria de la Ciudad de Santander, memoria obligatoria. Lunes después de Pentecostés: en la Ciudad de Santander
                     o BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, MADRE DE LA IGLESIA, memoria obligatoria

El culto a esta advocación marinera se remonta al siglo XIV y su origen se relaciona con diversas leyendas y el voto que los Cabildos civil y eclesiástico de Santander ofrecían a la Virgen.

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Al noroeste de la ciudad de Santander, en una pequeña isla se halla una ermita fundada a finales del siglo XIV, donde recibe culto una imagen de la B. M. V. bajo la advocación Virgen del Mar. El 4 de junio de 1979 el obispo de la diócesis Del Val Gallo la proclamó, junto a los mártires san Emeterio y san Celedonio, patrona del término municipal de Santander. Posteriormente, el 25 de junio de 2005, su sucesor en la sede santanderina, el obispo Vilaplana Blasco, la coronó canónicamente.

Desde siglos, la devoción a la Virgen del Mar ha tenido un influjo extraordinario en la ciudad de Santander. A ella se encomendaban las tripulaciones de los barcos, tras las angustias sufridas en el mar. En el siglo XVI la ciudad sufrió continuos azotes de la peste y entonces todos los vecinos se encomendaban a ella.

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Memoria de la bienaventurada Virgen María, madre de la Iglesia, a quién Cristo encomendó sus discípulos para que, perseverando en la oración al Espíritu Santo, cooperaran en el anuncio del Evangelio (elog. del Martirologio Romano).

La bienaventurada Virgen María recibe el título de Madre de la Iglesia, puesto que ella ha engendrado a Cristo, Cabeza de la Iglesia y en la redención fue proclamada Madre antes de que el Hijo en la cruz entregara su espíritu. El papa Pablo VI confirmó solemnemente este título en la alocución a los Padres del Concilio Vaticano II, el día 21 de noviembre de 1964, y estableció que "de ahora en adelante sea honrada e invocada por todo el pueblo cristiano con este gratísimo título, la Madre de Dios".