lunes, 14 de septiembre de 2009
Programación Pastoral Diocesana 09/10
Programación Pastoral Diocesana 2009-2010
La Programación Pastoral Diocesana para el curso 20009-2010 está entresacada del PLAN DIOCESANO DE PASTORAL 2009-2014. Ha sido diseñada por la Comisión Mixta y ha sido aprobada por el Consejo Presbiteral y Consejo Pastoral Diocesano.
Recoge algunos objetivos en cada uno de los campos de: experiencia de comunión, anuncio de la Palabra; celebración de la fe; expresión de la caridad. Como trasfondo tiene el objetivo general de vivir y transmitir la fe aquí y ahora. Es una propuesta audaz y comprometedora, pero realista y verdadera. Una condición fundamental para vivir y transmitir la fe es la recuperación del vigor espiritual de la Iglesia, de las familias, de las parroquias y de todos los miembros del Pueblo de Dios: sacerdotes, miembros de vida consagrada y fieles laicos.
Por eso, a la hora de pensar en la vivencia y transmisión de la fe a las futuras generaciones, en el fortalecimiento de la comunión eclesial, en el anuncio de la Palabra, en la celebración de la fe y en la expresión de la caridad, es necesaria la conversión de los cristianos, la conversión de la Iglesia, nuestra propia conversión. Necesitamos evangelizadores creíbles por su testimonio personal y comunitario de una vida de santidad.
Desde estas breves líneas de presentación exhorto vivamente a todos los diocesanos a acoger esta Programación Pastoral para el curso 2009-2010, a estudiarla, orarla y ponerla en práctica.
Soy consciente del momento difícil en que vivimos. En nuestra situación histórica es necesario crecer en la virtud de la esperanza teologal, propia de los caminantes, que procede de Dios y que no defrauda (cfr. Rom 5, 5).
Necesitamos cuidar la esperanza y abrir los ojos a todas las realidades positivas y a los pequeños crecimientos de la semilla del Reino de Dios, para que los problemas o las dificultades no nos agobien ni las nubes nos lleven a negar las estrellas. Una apertura de la mente y el corazón a las perspectivas más amplias de la historia impedirá que nos quedemos en la nostalgia del pasado y nos orientará con serenidad hacia el futuro.
Santander, 29 de junio de 2009, Solemnidad de San Pedro y San Pablo. + Vicente Jiménez Zamora, Obispo de Santander
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario