El Ayuntamiento de la Villa recibió, el día 22 de febrero, una roca y un par de puñados de tierra procedentes de la playa de isla Floreana, en el archipiélago de los Galápagos, lugar en el que, el 14 de marzo de 1535, desembarcó fray Tomás de Berlanga tras un accidentado viaje. La doctora Estrella Figueras, que trabaja en una biografía del ilustre dominico berlangués, fue la encargada de hacer la entrega al alcalde, Álvaro López Molina, de estos simbólicos objetos con el fin de reforzar el acercamiento entre ambas tierras.
Revista Arevacos
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