SE TRIPLICA EL NÚMERO DE USUARIOS DEL ECONOMATO DE LA COCINA ECONÓMICA.
ENVIADOS POR CÁRITAS, EL AYUNTAMIENTO, CANTABRIA ACOGE Y OTRAS INSTITUCIONES, RECIBEN GRATIS ALIEMNTOS Y PRODUCTOS BÁSICOS DE HIGIENE.
El economato de la Cocina Económica no da a basto. Cáritas parroquiales de Santander, Cáritas parroquiales de los pueblos, el Obispado, Cruz Roja y Cantabria Acoge emiten los vales de comida para las familias, que reciben desde pollo a latas de conservas, pasando por garbanzos y hasta papel higiénico o productos de limpieza de primera necesidad para el cuerpo, la casa o la ropa.
La mayor parte de los artículos que se entregan en el economato se adquieren a los mayoristas, cosas de primera calidad a muy buenos precios. Por estas monjas pasan todo tipo de aliementos de primera calidad: los solomillos que sobraron en un banquete, los cientos de canapés que no se consumieron en una recepción; las docenas de bollos que no consiguieron vender los pasteleros...
"Las donaciones que recibimos -indica la hermana Dolores Jiménez- son grandes gestos de solidaridad de toda Cantabria." En la casa de las Hijas de la Caridad de la calle Tantín viven y trabajan 13 "monjas", que cuentan con el apoyo de más de un centenar de voluntarios en la Cocina Económica, el economato o cuanto haga falta. Son muchas las familias que se acercan.
Juan Carlos Flores-Gispert (El Diario Montañés) 21-09-09
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