EL PAPA DECLARA MÁRTIRES A CINCO VECINOS DE SUANCES ASESINADOS EN 1937
El sacerdote Valentín Palencia y cuatro jóvenes laicos participaban en una colonia para niños huérfanos cuando estalló la Guerra Civil
Residía en Suances cuando le sorprendió la Guerra Civil española. La decisión del Papa de promulgar estos decretos se produjo el miércoles 30 de septiembre, tras mantener una audiencia privada con el cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.
En este caso, junto al sacerdote se ha reconocido la venerabilidad de los también castellanos Donato Rodríguez García, que cuando fue asesinado tenía 25 años; Germán García García, de 24 años; Zacarías Cuesta Campo, de 20 años, y Emilio Huidobro Corrales, de 19 años, todos asesinados cerca del Alto del Turujal y enterrados en Ruiloba.
El sacerdote Valentín Palencia fundó un patronato en Burgos para acoger a niños huérfanos y pobres.
El Libro de Fábrica de las parroquias -en este caso el de Suances- que es el que recoge el devenir de las actuaciones en cada una de ellas, deja constancia de ello.
Según se relata en la causa seguida, y con el testimonio además de quienes vivieron en persona lo acaecido en Suances, "los milicianos le prohibieron celebrar la Eucaristía" sufriendo después martirio hasta su muerte.
Pero aún queda un largo camino por recorrer. La noticia difundida por la Santa Sede fue recibida con júbilo en la villa cántabra de Suances donde su actual párroco, Baldomero Maza, como custodio de los libros parroquiales, se personó en la causa de estos ya venerables en su camino hacia la beatificación.
Maza explicó que había vivido muy de cerca este proceso "y supe de lo ocurrido y del testimonio de fe y de caridad que realizó este sacerdote por algunas personas de la villa que fueron testigos de primera mano".
Nieves Bolado (El Diario Montañés) 2-10-15
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