La música, clave en el encuentro entre La Oración en el Huerto y La Flagelación
Mariano Granados fue otra vez el lugar favorito para seguir esta procesión
La iglesia del Espino bajo la luna llena, bellísima. "Ya salen, mira", comentaba cerca del Olmo Seco una de las más de 150 personas que no quisieron perderse ayer una de las salidas más espectaculares de la Semana Santa soriana.
Pero hubo que esperar unos minutos más.
Y mientras comenzaba a girar dentro de la plaza, La Flagelación ralentizaba su marcha hasta que ésta se hubo posicionado en el espacio (éste es el segundo año que el desfile sacro utilizó la nueva disposición peatonal y el público aún se mostró algo despistado sobre dónde colocarse).
Ocho minutos más tarde, La Flagelación llegó rodeando por detrás el arco marquesina de Mariano Granados. Los estandartes de ambas Hermandades se rendían pleitesía mutua a las 21.54 y, justo después, con ambas cofradías desplegadas en paralelo a lo largo, comenzó un diálogo musical entre ambas que este año ha tenido mucho protagonismo y en el que destacó la riqueza que aportaron las dos carracas que La Flagelación incluyó el año pasado en su formación.
Tras los aplausos del público en el momento culminante del cortejo sacro, ambas cofradías iniciaron juntas, como lo llevan haciendo desde hace 57 años en la jornada del Martes Santo, su periplo hasta la concatedral de San Pedro a través de El Collado, la plaza Mayor, los Mirandas y la calle Real.
S. Almoguera (23-03-2016)
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