viernes, 28 de noviembre de 2008

Cuatro clarisas a Mozambique.





Cuatro clarisas de Soria viajan a Maputo para constituir una fundación
Mostrarán el cristianismo en el sureste africano y construirán un monasterio.

Ical. Soria

Cuatro religiosas de la Orden de las Clarisas de Soria han viajado a Mozambique con el objetivo de constituir una fundación que estará localizada a 80 kilómetros de Maputo, capital del país africano.

La hermana sor Sagrario precisó que el proyecto persigue llevar la vida contemplativa y la evangelización al sureste de África y añadió que no se trata de imponer la cultura europea en este país sino de que la Iglesia Católica se inserte en la cultura africana. “Todos tenemos mucho que aprender”, apostilló.

Sor Sagrario significó que Europa lleva 21 siglos de cristianismo y es por ello que la Iglesia está obligada a llevar a estos países, donde no se conoce la fe, la vida contemplativa y la evangelización. Asimismo, indicó que las cuatro hermanas no tienen miedo, ni temen poner en peligro su integridad física ya que, “por Dios están dispuestas a dar su vida”.

Según la monja, el proyecto se comenzó a fraguar hace dos décadas cuando el obispo de Mozambique les solicitaba la constitución de una fundación, a raíz de que en Zimbawue se creará otra con cuatro hermanas de las Clarisas.

Después de numerosos trámites y de la paralización del proyecto por parte de una autoridad eclesiástica de aquel país, dos hermanas de vida activa franciscanas decidieron tomar las riendas del proyecto. Viajaron a España para formarse en la vida contemplativa y transcurridos doce años viajaron de nuevo a Mozambique para crear la fundación de las Hermanas Clarisas. “Hace tres años nombraron de arzobispo a Francisco Chimoio que ha sido el encargado de dar el visto bueno al proyecto y el que nos ha cedido el terreno a 80 kilómetros de la capital para que construyamos el monasterio”.

Hasta que el monasterio se construya, las cuatro hermanas sorianas vivirán en una pequeña casa cercana. Sor Sagrario manifestó estar “ilusionada” con el proyecto y subrayó que la vocación misionara es algo “especial”. “Doy las gracias a Dios porque me da fuerzas para dejar mi vida, mi patria y mi familia y adentrarme en un idioma y una cultura diferentes para mí. Sabemos que con su fuerza lograremos sacar adelante el proyecto”.

La religiosa avanzó que tomarán como ejemplo a la fundación de Zimbawue donde la abadesa y la maestra de novicias son africanas. “En este monasterio no hay muchas vocaciones porque el número de católicos es inferior a la de Mozambique. Sin embargo, es una fundación que funciona bien y la sociedad agradece mucho tener cerca a hermanas que rezan por ellos”.

No hay comentarios: