El fuego fue originado por el Cirio Pascual en el altar mayor, del que se salvó un crucifijo de madera
Acilino García, el sacerdote, destaca que lo que se ha quemado no tenía un gran valor
La iglesia del barrio del Bardalón, en Los Corrales de Buelna, ha vuelto a su actividad normal, aunque el olor a incienso ha dejado paso al de humo.
Igual de curioso es que el fuego tampoco llegara al retablo mayor, también de madera y conectado con el altar incendiado por una alfombra que si se quemó.
Todo ocurrió en la noche del sábado. Ese día, Acilino García apagó todas las velas, las luces, cerró puertas y ventanas pero, dejó una de las altas abierta.
Hombre práctico donde los haya, habla de daños materiales pero no patrimoniales, pues lo quemado no tenía un valor excesivo.
El cura tenía misa a las 10.00 de la mañana en otro templo, y dejó a los vecinos adecentando la iglesia para su misa, a las 11.00, como toda la vida, en San Ramón.
El responsable de la parroquia de Los Corrales de Buelna, Francisco Lledías, recuperó un altar que tenían en el almacén y lo llevó a la iglesia de San Ramón.
Nacho Cavia / Foto: Cavia (El Diario Montañés) 24-04-13
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