Gobierno de la Diócesis

SÁNCHEZ MONGE ACOMETE UNA PROFUNDA RENOVACIÓN EN EL GOBIERNO DE LA DIÓCESIS

El obispo se rodea de colaboradores con un perfil más social que sus antecesores y marca equilibrio entre juventud y experiencia

Reduce la organización arciprestal, equilibra la juventud con la experiencia y apuesta por los laicos

Desde que en el mes de junio de 2015 llegóa a ocupar la seo de Santander, Manuel Sánchez Monge ha ido preparando una remodelación de los órganos de gobierno y consultoría que finalizó con la constitución del Consejo Pastoral, un órgano en el que los laicos cobran especial importancia.

La edad media de los sacerdotes en Cantabria es de 64,4 años, mientras que el Consejo del actual obispo cifra la edad media en 58 años, teniendo en cuenta que entre sus colaboradores más cercanos hay dos sacedotes con 44 y 42 años, dos con 52 y 59 años y dos con 68 y 74 años.

"Después del Concilio Vaticano II, el obispo no gobierna de forma personal, sino que cuenta con consejeros, si bien no tienen poder decisorio, pero debe escuchar sus consejos porque es bueno y necesario la colegiación", explica el obispo Sánchez Monge.

Después del obispo, el cargo más importante en el organigrama diocesano lo tiene el vicario general -Manuel Herero fernández, que se revalida en el cargo-, un nombramiento obligado para cada diócesis.

Por priemra vez se nombra en Cantabria un provicario general -Sergio Llata- cuya misión es ayudar en todo al vicario general, convirtiéndose de alguna amnera en su asistente y consejero más próximo.

Con satisfacción generalizada, sobre todo entre los laicos y los sectores más avanzados de la Iglesia cántabra, ha sido recibido el nombramiento de Juan carlos Rodríguez del Pozo, párroco de La Asunción de Torrelavega, como vicario de Pastoral.

En cada curia debe haber un canciller, cuya principal función consiste en cudear de que se redacten las actas, se expidan y se custodien en el archivo.

El ecónomo diocesano, Ramón Ocejo, viene a sustituir a José Oláiz, que se ha jubilado, y que ocupó este mismo cargo con el título de vicario.

Sánchez Monge cree "imprescindible" la participación "de sacerdotes, laicos y religiosos en la corresponsabilidad de la Iglesia, buscando el bien de la diócesis y no el particular".

Y en esta misión jugarán un papel importante los aciprestazgos. Otra de las novedades ha sido su reducción, que de 16 pasan a 13. Además Sánchez Monge ha constituido el Consejo Presbiterial y el Consejo de Pastoral.

Nieves Bolado (El Diario Montañés) 29-02-16

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